¡ QUE NADA TE PARE, SALVO LOS FRENOS DE TU CITROËN !

Para un precio sin sorpresas, el plan de frenos incluye todas las piezas y mano de obra, con sustitución de:

• las pastillas de freno delanteras y/o traseras
• o los discos y pastillas de freno delanteras y/o traseras
• o el kit de freno de tambor trasero
• o el líquido de frenos

• Después de cambiar las pastillas, acomódalas pisando ligeramente los frenos varias veces.
• Después de lavar tu vehículo, pisa ligeramente los frenos para permitir que el calor generado seque las piezas.
• Por último, recuerda que cualquier sistema de frenado solo funciona bien cuando los amortiguadores y los neumáticos están en buenas condiciones.

El sistema de frenado debe responder de forma instantánea y precisa cuando pises el pedal. Si observas uno o más de estos signos de desgaste, consúltanos.

• El vehículo gira bruscamente al frenar: un cilindro de la rueda o una pinza se pueden atascar, o simplemente un neumático está desinflado. Los amortiguadores gastados también pueden tener las mismas consecuencias.
• El vehículo vibra al frenar: lo más probable es que esté causado por discos de freno defectuosos, una pieza suelta o una holgura excesiva en el eje delantero o trasero.
• El vehículo "tiembla" al frenar: si los frenos se bloquean al menor esfuerzo, puede ser una señal de un problema con los discos, los tambores o las pastillas de freno.
• se enciende la luz de advertencia de freno: el freno de mano está activado, el nivel de líquido es demasiado bajo o las pastillas están demasiado gastadas. No tomes esta advertencia a la ligera.
• El pedal del freno está duro: esto podría deberse a una falla del asistente de frenado, mangueras o circuito hidráulico, cilindros de rueda o pinzas.
• El pedal del freno está suave: el pedal se hunde en un vacío, hay que “bombear” para poder frenar. Ten cuidado, esto es una señal de un problema grave con el sistema hidráulico.